"Experimentacion y argumentacion"...

Es posible estudiar objetos en el laboratorio con comportamiento muy cercano al del cuerpo negro. Para ello se estudia la radiación proveniente de un agujero pequeño en una cámara aislada. La cámara absorbe muy poca energía del exterior, ya que ésta solo puede incidir por el reducido agujero. Sin embargo, la cavidad irradia energía como un cuerpo negro. La luz emitida depende de la temperatura del interior de la cavidad, produciendo el espectro de emisión de un cuerpo negro. El sistema funciona de la siguiente manera:
La luz que entra por el orificio incide sobre la pared más alejada, donde parte de ella es absorbida y otra reflejada en un ángulo aleatorio y vuelve a incidir sobre otra parte de la pared. En ella, parte vuelve a ser absorbido y otra parte reflejada, y en cada reflexión una parte de la luz es absorbida por las paredes de la cavidad. Después de muchas reflexiones, toda la energía incidente ha sido absorbida.

Lummen y Pringsheim estudiaron experimentalmente la energía emitida a diferentes longitudes de onda, obteniendo distintas curvas a distintas temperaturas. Este espectro de emisión de la radiación de cuerpo negro no podía ser explicado con la teoría clásica del electromagnetismo y la mecánica clásica. Estas teorías predecían una intensidad creciente (infinita, para longitudes de onda tendiendo a cero) de la radiación hacia longitudes de onda bajas (altas frecuencias) y, sin embargo, las mediciones experimentales mostraban que la intensidad decrecía a cero. A este problema se le conoce como la catástrofe ultravioleta. El problema teórico fue resuelto por Max Planck, quien supuso que la radiación electromagnética se debía a la emisión de un enorme número de osciladores elementales que sólo pueden emitir en paquetes de energía discretos, a los que llamó quanta. La energía E de cada oscilador no puede tomar valores arbitrarios, sino sólo múltiplos de la frecuencia del oscilador . A partir de aquí, Planck explicó la radiación del cuerpo negro, uno de los mayores retos de la física de finales del siglo XIX.
La idea de Planck fue utilizada poco después por Albert Einstein para explicar el efecto fotoeléctrico. Estos dos trabajos constituyen los cimientos básicos sobre los que se asentó la mecánica cuántica. Hoy llamamos fotones a los quanta de Planck.